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El núcleo del pueblo tiene gran interés, con el Castillo ( de época medieval pero muy reformado) que dio nombre a la población, y a su lado la iglesia de Santa Maria, de estilo gótico tardano. Un paseo por los alrededores de estos dos edificios, por las calles estrechas y con fuertes pendientes que forman el núcleo, permite observar diferentes casas de los siglos XVI al XVIII con elementos arquitectónicos de interés. |
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El término de Castell d'Aro parece constituir un pequeño mosaico de piezas bien diferentes. La densa y febril Platja d'Aro va unida al núcleo de Castell d'Aro con sus alrededores, y ambas se complementan con el sector montañoso y boscoso de la parte norte del término. Una cuarta pieza absolutamente diferente y de gran calidad acaba de completar el mosaico. Se trata de s'Agaró, urbanización situada a la costa sur del término.
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Entre las casas de la urbanización de s'Agaró y los acantilados del mar existe un camino de ronda que permite ir de la playa de Sant Pol a la de la Conca, con numerosos puntos que ofrecen magníficas perspectivas sobre el mar. Conviene ir muchas veces para poder gozar de su encanto en cada época del año. |
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